El talento de Mr. Ripley


The Talented Mr. Ripley
Quien valore la literatura de Patricia Highsmith y espere de esta novela suya llevada al cine una recreación fiel, se sentirá doblemente defraudado; uno, porque en la película de Minghella no están ni el estilo ni el espíritu de Highsmith, y dos, porque tampoco están el argumento y personajes de El talento de Mr. Ripley. Cabe añadir un tercer motivo de decepción: la película de Minghella no es una superación de la obra imitada, con lanzamiento de esta al abismo del olvido, sino que Highsmith y su novela claman a gritos venganza por fraude, uso indebido de nombre y obra ajenos, desacato impertinente a la propiedad intelectual, etc., etc.; sobre todo si se tiene en cuenta que entre los premios a los que optó la película se incluyó el correspondiente al mejor guión adaptado.
¿Quién le hizo creer, Sr. Minghella, que podría impunemente disfrazarse de Patricia Highsmith? ¿No puede usted subir solo la escalera del arte? No la suba; pero respete la propiedad ajena. Este tribunal le declara reo de zafiedad artística, mediocridad probada con presunción de incompetencia.
Dickie Greenleaf es un joven norteamericano que gasta irresponsablemente en las playas de Italia, y junto a Marge Sherwood, el dinero de su millonario padre. Por un casi increíble malentendido, este envía a Tom Ripley —la persona más inadecuada del universo— a Italia para que convenza a su hijo Dickie y le haga volver a casa. A partir de este planteamiento, y entre estos tres jóvenes se urde la complicada y criminal trama.
En cierto modo, el joven Ripley de la novela es el mismo joven millonario de Extraños en un tren —la primera novela de Patricia Highsmith—, figura que la escritora continúa en varias de sus novelas: una criatura sin conciencia, incapaz de remordimiento, tan encantadora y atractiva en lo externo como secretamente egoísta; un ser complejísimo del que el guión fílmico, y sobre todo el actor Matt Damon, han hecho un acartonado muñeco que, de cuando en cuando, muestra sus grandes dientes blancos. Sus crímenes, en la película, no despiertan terror, ni inquietud alguna la trama que su talento urde para evitar ser inculpado.
Mejor está como actor Jude Law, en su frívolo papel del bello Dickie Greenleaf, que le valió las candidaturas al Globo de Oro y al Oscar al mejor actor de reparto. En la novela, este y Ripley —sexualmente ambiguos— se sienten atraídos el uno por el otro, y la feúcha y torpe Marge, siempre al lado de Greenleaf, es solo una pantalla para salvaguardar el honor masculino de este. En cambio, Minghella, al hacer de Greenleaf un don Juan, hasta cruel con las mujeres, desbarata la trama original del libro sin recomponerla en el guión; y si la feúcha y torpe Marge es, nada menos, que la guapa y elegante Gwyneth Paltrow, no se entiende por qué Greenleaf no le hace caso. No, no se entiende. Y, por cierto, el personaje interpretado por Cate Blanchett, inventado por Minghella, tampoco se entiende.
Por casualidad, tal vez, permanece un personaje secundario acorde con la novela: Freddie Miles, perfectamente interpretado por Philip Seymour Hoffman, grandísimo actor, según mi apreciación (véanse Happiness y Magnolia, por ejemplo).
Así que El talento de Mr. Ripley queda reducido a una reproducción de una Italia de los 40, con mucha música de jazz, con gente guapa y bien vestida por todas partes, y el relato de una historia que... importa bien poco; resulta larga y pesada, tal vez porque cuanto más se adentra el dedo/guión en la llaga de la trama, más lioso, inconsecuente y arrítmico se muestra; la arritmia narrativa es funesta, y si lo que se narran son crímenes y el modo de escapar de ellos, se llega al hartazgo: "Ya todo me da igual. Como si quiere matar a otro". Y, efectivamente, Minghella hace que el asesino mate a otro que no estaba en los papeles de la Highsmith.
Ojalá terminaran ya esos robos y destrozos con escalo y alevosía de propiedades intelectuales ajenas. P.A.U.

Director: Anthony Minghella.
Intérpretes: Matt Damon (Tom Ripley), Jude Law (Dickie Greenleaf), Gwyneth Paltrow (Marge Sheerwood), Cate Blanchett (Meredith Logue), Philip Seymour Hoffman (Freddie Miles), Jack Davenport (Peter Smith-Kingsley), James Rebhorn (Herbert Greenleaf).
País: Estados Unidos.
Año: 1999.
Producción: William Horberger y Tom Sternberg para Mirage Enterprises y Timnick Films.
Presentada por: Miramax International y Paramount Pictures.
Argumento: Basado en la novela homónima de Patricia Highsmith. 
Editorial: Anagrama.
Guión: Anthony Minghella.
Música: Gabriel Yared.
B.S.O.: Sony Classical.
Fotografía: John Seale.
Dirección artística: Roy Walker. 
Montaje:Walter Murch.
Vestuario: Ann Roth y Gary Jones.
Estreno en Madrid: 25-II-00.
Distribuidora cine: Lauren Films.
Distribuidora vídeo: Lauren Films.
Duración: 141 minutos.
Género: Thriller.
Temas de cinefórum: Novelas de suspense. Adaptaciones literarias. Homosexualidad. Amor y pasión. Hedonismo. Millonarios. Italia en los años 40. Jazz. 
Premios principales: Premios 1999 de la Asociación Nacional de Críticos de Cine de Estados Unidos al mejor director y actor secundario (Jude Law). Candidaturas a los Globos de Oro 1999 a la mejor película, director, actor (Matt Damon), actor secundario (Jude Law) y banda sonora original. Candidaturas a los Oscars 1999 al mejor actor secundario (Jude Law), guión adaptado, dirección artística, vestuario y banda sonora original.
Público adecuado: Adultos.
Contenidos especiales: V+ X D.